viernes, 11 de abril de 2008

Simbolismos

Cerca de mi casa había hace tiempo una librería cristiana, de esas que están repletas de libritos de autoayuda, en los que habla Dios.
En una ocasión vi casi de reojo un cartel que llamó mi atención -aunque no lo suficiente- colocado en una de las paredes del local. Era una especie de lista de símbolos y signos conocidos, entre los que destacaban los del yin-yang, 'amor y paz' y 'anarquía'. Ahí quedó.

Hace unos días vi el mismo cartel en un modesto puestecito de librillos (también cristianos) que está cercano a una de las entradas del metro potero. Al fin pude poner atención al mensaje del cartel:
¡Cuidado! Estos son los signos que Satanás utiliza para encantar a los jóvenes y llevarlos por la senda de la destrucción. Sólo hay un Dios salvador, creador misericordioso... ¡BLAH!

Reflexionando el mensaje, lo comprendo al fin:
Etimológicamente, satanas//satâna //shatán es un término que se traduce como adversario, enemigo o acusador. Por tanto:

'Amor y paz' es, filosóficamente hablando, un símbolo de contenido adverso a los principios de las naciones beligerantes. Porque quienes hacen la guerra no pueden permitirse contar entre sus soldados potenciales a una bola de hippies pacifistas. Y quienes han generado las peores guerras, desde el Imperio Bizantino, son los allegados al cristianismo//catolicismo. Por tanto, amor y paz es un símbolo satánico, adverso a los principios que sostienen los aliados del culto a Cristo.

'Anarquía' (αν=no; αρχω=jefe) es un postulado que los círculos de poder no pueden tolerar. Por interesante que sea, se ha satanizado al grado de asociarse con el caos, restándole el ideal utópico de una sociedad que no requiera figuras que ejerzan poder o autoridad, donde la convivencia entre seres humanos civilizados sea la base del desarrollo. El Estado y la Iglesia, aunque se separen, no dejan de ser familia. Y como el enemigo de mi amigo es mi enemigo... ¡Satanás! Yo te maldigo.

'Yin-Yang' es un concepto oriental nada nuevo que fue introducido hace relativamente poco tiempo en occidente gracias a la influencia del new age. Representa simplemente la dualidad de todo lo que existe en el universo: como hay día, hay noche; como uno respira, también inspira; como hay vida, hay muerte... Y aquí sobra decir que, en occidente, las religiones hegemónicas basan su sistema de creencias en la fe hacia un único Dios con características masculinas/paternales y, aunque existen figuras como las múltiples vírgenes que se aparecen por todo el mundo, son los elementos masculinos los que predominan. So... lo dual es satánico, adverso al principio creador masculino de occidente y medio oriente.

¿Jesús? Como figura religiosa e incluso "histórica" no tiene la culpa de que existan tales ideas. A él lo considero un HOMBRE que accedió a un espectro de conocimientos mucho más amplio que la mayoría de sus congéneres. Un hombre nacido judío que sobresalió por su sabiduría, convirtiéndose en un ser anacrónico, adverso a los principios y costumbres del pueblo de sus padres. Él fue satanizado en su momento y, quizá, muerto por sus ideales, los cuales fueron considerados crímenes graves para el pueblo hebreo.

OK, EDITO:
Qué suerte tiene este blog. Yo rara vez hablo de Jesús. Y todo por un cochino cartel satánico.
Bien dicen: nunca digas nunca.

2 comentarios:

Sofía Reyes dijo...

De hecho, una vez hablamos de algo así. Así que ese nunca ya fue, dos veces.

Anónimo dijo...

Yo odié cuando se mostró el documental alegando que Jesús tuvo hijos y esposa, y toda la gente se puso a ladrar que todo eso era una falta de respeto. Yo prefiero ver a Dios como un ser humano con la determinación para cambiar al mundo.