miércoles, 25 de febrero de 2009

¿Qué es peor?

¿El Machetearte o los vendedores de discos piratas del metro?

Los repartidores voluntarios del subversivo periodiquín realizan una labor que se puede considerar social, demuestran afinidad a los movimientos de resistencia civil y logran lo que ni los medios, ni los partidos: involucrar a jóvenes en el análisis de la realidad nacional.
Pero sigue siendo estresante y molesto que se metan al vagón a vociferar sobre las virtudes de su medio a manera de carencias: "¡Aquí no vas a encontrar viejas encueradas, ni la reseña del partido de fútbol de ayer...!". ¿Les ha tocado el chavo de la línea 3 que, vestido de manta y huaraches, se mofa castrosamente de la tendencia citadina a enriquecer el status adquiriendo artículos de marca? Es algo como: "¡Pero a ellos qué les va a importar que a la gente la desaparezcan! Si están más ocupados en comprar y comprar... 'Guuucciiii'... 'Armaaaniiiiii'... 'iiiPoooood'..." Castroso, castroso, castroso...

Y el segundo caso, los vendedores de cds piratas en "...formato normal o formato MP3...". Esos que traen al hombro su morralote con la bocina adentro, conectada al walkman, el abuelo del ipod, del cual ahora sólo los comerciantes informales se acuerdan.
"Son 50 éxitos... lo mejor del rock alternativo... vale diez... viene calado, viene garantizado... le cuesta diez..." ¡Es molesto! ¡La bocina a un metro de tu cabeza y con el sonido distorsionado y mal ecualizado a volúmen MO-LES-TO.
Pero les reconozco algo: que venden música. No la venden respetando los derechos de autor y de copia... hacen piratería... con todas sus letras... pero ayudan a distribuir la música... una labor que podría considerarse loable, la de difundir la creación artística (al nivel que sea y del género que sea). Aunque claro, si uno quiere música, basta con bajarla de internet... o comprar cd's originales... caros... pero que valen cada peso invertido cuando a uno lo hipnotizan las notas, el ritmo... bajos, riffs, beats... vocales, letras...

No sé cuál es peor. Para mí, ambos grupos tienen aspectos que parecen salvables, pero el hecho es que me molestan. No puedo elegir uno. ¿Y vos?

1 comentario:

Max dijo...

Mil veces los malditos vendedores de piratería. Como los odio!!!! Siempre que uno esta cerca de mi, le lanzo una mirada fulminante o le impido el paso.

Ya que los saquen!!!!