Me doy cuenta de que yo también tuve una educación retrógrada, a cargo de una mujer (mi abuela) sin mucho interés por otorgarme lo más esencial y reconocido del conocimiento más general. Lo que para los adultos se presume un hecho consumado, para mí era pura confusión.
Y así se da uno cuenta de que la verdad no es sólo relativa a quien la cree, sino a quien la dice. Ya me imagino a la niña en la escuela, ilustrando a sus compañeros, quienes creen -ilusos ellos- que moda es sinónimo de usual, recurrente, repetitivo...
El lenguaje de la verdad debe ser, sin duda alguna, simple y sin artificios.
-Lucio Anneo Séneca.
(Filósofo romano, tutor y consejero del emperador Nerón.)
-Lucio Anneo Séneca.
(Filósofo romano, tutor y consejero del emperador Nerón.)
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